domingo, 16 de noviembre de 2014

CREACÓN 1. LETRA C.


En la Catedral de los Caminos, caminaba el caballero complacido, pues concluido un duro conflicto ve más claro su camino. Cavila en ir en busca de su Cristina. Caído el ocaso correrá hacia ella con su corcel  y  le colocará un camafeo de colores celestes en su cuello, ella no muy convencida considera que el presente ha sido por conveniencia y calla para conseguir su confesión. El caballero, consciente de la cara poco convencida de su corazón, con la mirada en el bello collar que se columpiaba constantemente con cada celeridad de su amada, la cogió de la cintura y corriendo se colocó frente a la Catedral, que contra ellos crecía como un cáustico coloso. Con cariño se arrodillo ante ella y le pidió casorio, mientras ella compungida lloraba, ya que por su cachaza ya estaba casada. Llegó el cónyuge de la chica y concentrado en su objetivo cortó con su cimitarra el cabello del caballero, el cual aceleradamente se colocó su carcaj y disparó, clavando una flecha en la cadera a su contendiente, quien antes de caer intentó acabar con su contrincante. En ese momento la muchacha contuvo la estocada que se clavó en su cuerpo haciéndola caer. El caballero se acercó a ella mientra veía concluir su existencia y con amor le dío el adiós.

1 comentario:

  1. Inauguras tu blog con una brillante creación. Muy bien, María. Has creado un relato caballeresco muy bien estructurado y de sentido coherente. El léxico que has escogido lo has relacionado con inteligencia y acierto.

    Quizá habría que evitar períodos oracionales excesivamente largos. Mejor oraciones simples, cortas y directas. Comunican mejor. Una oración extensa debe estar muy bien puntuada y cohesionada para no perder el hilo de su sentido.

    Observa el final de tu texto. ¿No crees que podrías haber marcado ciertas pausas con un punto y seguido? (" quien antes de caer intentó acabar con su contrincante. En ese momento la muchacha contuvo la estocada que se clavó en su cuerpo haciéndola caer. El caballero se acercó a ella mientra veía concluir su existencia y con amor le dio el adiós".

    Enhorabuena, María.

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